Y qué decir de una serpiente, cuya mordida puede causarnos un daño físico.
Esto puede provocar que tengamos un temor racional hacia las serpientes, sin embargo, hay personas que desarrollan fobia hacia ellas. A esto se le conoce como Ofidiofobia.
Esta fobia pertenece a la Herpetofobia, y a su vez a la Zoofobia.
Aún cuando es común que el temor se desarrolle por un evento traumático en el pasado, se han registrado casos en que las creencias religiosas de la persona, son el detonante; ya que algunas religiones o culturas asocian a la serpiente con la representación del mal.
Algunos estudios han arrojado que las personas con Ofidiofobia, le temen a las serpientes principalmente por ser venenosas, a pesar de que solo el 10% de las especies lo son.
Algunos más lo asocian a su mirada, su piel e incluso por su legua bífida.
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